jueves, mayo 13, 2004

ejercicio number one

no es el objetivo de este humilde blog el ser usado como "sección quejas", de ninguna manera, pero quisiera dejar por aquí algunos apuntes que no me caben en otro lado.

una de las cosas en que vengo pensando esta semana --desde hace mucho más tiempo en realidad-- es el asunto de la timidez. quizás debiera ser considerada una enfermedad, y quizás alguien debería inventar una pastilla, una vacuna a ser suministrada a los 6 meses de nacido el sujeto proclive a ser tímido. como escuché ayer en un programa de tv, una de las cosas que puede decirse de la timidez es que supone una enorme pérdida de tiempo. vale, es cierto. los tímidos, de eso me he dado cuenta hace un par de años, nos demoramos 5 ó 6 veces más en hacer las mismas cosas que los demás. tener una primera conversación con alguien, por ejemplo. ser tímido es pasar dos semanas yendo a clases de français tratando de encontrar el momento adecuado para decirle algo --algo: ¿qué?-- a la chica que se sienta a tu costado, pensando cosas como "hoy nos hemos sonreido, en medio de una conjugación de verbos", soñando en el camino de ida en la combi cosas como y si llego temprano a clases y nadie ha entrado al salón todavía, y ella está sola, sentadita con su uniforme, esperando en la banca que está afuera del salón, y entonces llego yo y le digo hola, y entonces ella me dice hola, y pensar luego en qué pasa si después seguimos conversando y ella sonríe de nuevo, y ver la escena como una película en tu cabeza, el proyector está en tu nuca y la pantalla son tus propios ojos, flashforward de aquí a 10 años, cómo será tener cinco hijitos con esta chica. es pensar en todas esas cosas paparulas sin poder evitarlo mucho en realidad, y luego, en medio de una conjugación de verbos, en silencio completo siempre, en búsqueda de aquel momento adecuado siempre, darse cuenta de que el tipo más huevón de la clase, el que menos parecía que, se sienta al costado de la chica que se sienta a tu costado, y empieza a conversarle, y le hace toda clase de preguntas idiotas pero de pronto ya están riendo juntos, ella y él, y hacia el final de la clase probablemente serán amigos inseparables y para la próxima semana quién sabe, todo en medio de una conjugación de verbos en français. y sentir algo en la boca del estómago, pero seguir conjugando verbos en français como si nada estuviera sucediendo, eso es más o menos la experiencia de la timidez.



saliendo de la alianza y pensando en cosas como estas veo, por el rabillo del ojo, a un chico que estudia en mi salón, caminando a mi costado. por costumbre, sin que haya ningún pensamiento de por medio, me hago el loco y sigo caminando nomás. 3 segundos después escucho una voz a mi costado, el chico, que me dice: "una pregunta, ¿tú eres periodista?" y entonces yo actúo: volteo y le digo "¡hola! ¡no te había visto!" y conversamos un ratito mientras vamos por la calle y yo pienso: qué tipo macanudo. incluso: me gustaría ser su amigo. la timidez es una manera retorcida de perder el tiempo.

* * *

tipeando estos dos apuntes que tomé en la combi hace una hora, me doy cuenta de las ganas que tengo de borrarlos, de que ya no existan. no jodas, voy a publicarlos. y de paso...


EJERCICIO NUMBER ONE

Tratar de no hacerme el loco por una semana, contando a partir de mañana. Simplemente eso. Estar completamente atento a cualquier oportunidad que tenga de hacerme el loco, y sabotearla. A ver qué pasa.


7:51 p. m. [césar]