jueves, mayo 13, 2004


[fragmento]

Días atrás la televisión había mostrado una noticia: se trataba de una mujer enferma, una mujer que vivía en otro país. Descubriéndose, la mujer confesaba que un dolor monstruoso la hincaba desde pequeña, en el interior de su pecho. Una virgen de yeso observaba con sus ojos blancos mientras la mujer se tocaba con el dedo, entre los senos: dieciséis veces en su vida habían brotado rosas de allí. El milagro era espantoso, como si ella estuviera alumbrando por el pecho. Las personas alrededor de la mujer se arrodillaron...

2:05 p. m. [césar]