sábado, mayo 15, 2004


hemos ido a recoger de donde el técnico el masajeador eléctrico que le había regalado a mi mamá por el día de la madre, y que ceci malogró el mismo día enchufándolo directo a 220. ("ah, la cosa que tiembla" dijo el hombre antes de ir a traer el masajeador ya arreglado). de regreso, le pregunto a mi mamá si hay noticias de mi viejo, si va a darle la plata de este mes o no. ella dice que no sabe nada de él, y que no cree que le de dinero nunca más ("seguro necesita plata para irse de juerga con la otra, para ir a visitarla a pucallpa" me dice, con calma, y allí hay algo que, a falta de mejor palabra, definiremos como maternal.) tensa calma en los cuarteles entonces.

3:30 p. m. [césar]